lunes, 3 de noviembre de 2014

Día 3 - Singapur


Esta mañana no sabía muy bien como plantear el día y al final ha sido un poco disperso, aunque, por primera vez, y sin que sirva de precedente, he seguido la ruta de la guía correctamente y no tenía fallos, o al menos yo he sabido ir bien por ella. El caso es que la primera idea que he tenido ha sido la de ir a "Little India", luego, cuando terminase, hacer algo de tiempo y comer y, por la tarde, acercame a spottear un poco, terminando en Marina Sands para hacer nocturnas. Así que, como ayer, lo primero pasar por la tienda de pastas y coger tres, que al final han sido cuatro, porque una de ellas era sólo de masa y era más pequeña, de las de sabores y hoy he repetido con la de piña, porque de café no había aún y luego he cogido de judía roja y sésamo, ricas las dos.



Cuando iba para el metro he pensado en cambiar un poco el plan e ir primero a spottear, porque hacía sol, pero al final, haciendo caso se la previsión se supone que por la tarde iba a mejorar, así que he seguido dirección "Little India", aunque en realidad la ruta empezaba dos estaciones más allá para volver hasta la estación que da nombre a la zona. Aunque la zona cuando más animada está, se supone que es por la tarde, cuando los currelas salen de trabajar e invaden todo aquello, a mi la verdad es que no me atraía nada la idea de lo que había visto en algún reportaje, así que he preferido ir por la mañana tranquilamente. Así pues me bajaba en Boon Keng y buscaba el primer punto de interés un templo buddhista, con un nombre larguísimo y que no voy a reproducir, pero que tenía una bonita fachada de relieves. Esa es una de las cosas que más me ha llamado la atención, mientras que en otros países en los templos las entradas son del tipo torii, aquí la mayoría de ellas son grabadas.


Después de este, he ido siguiente la ruta que indicaba que había dos, pero en realidad había tres puntos de interés, aunque dos de ellos pegados, el primero un templo de tipo más tradicional con grabados en el tejado y frente a el otro del mismo estilo y al lado de este un templo indio con un buda gigante en su interior y unos tigres en ambos lados de la fachada. En el segundo lo que más me ha llamado la atención era un pobre samoyedo que se debía estar acordando el iluminado que tuvo la idea de traerle aquí y es que si ya me parece excesivo tener un samoyedo en España, aquí, que la temperatura más baja que conocen debe de ser la que programan en el aire acondicionado, pues eso, que el pobre bicho andaba planchado. De  salida me ha abordado un tipo hindú que me ha preguntado que si me leía la mano que era un no se qué, pero he declinado su ofrecimiento y hemos seguido cada uno nuestro camino.

La calle principal de "Little India", Serangoon Rd. estaba adornada con el equivalente hindú a la iluminación de Navidad, con flores de loto e imagenes, una nota de color. En esta parte del recorrido se dedicaba a la parte comercial, primero porque pasaba por delante de las shophouses, unas casas restauradas muy chulas, que supongo que en tiempo tendrían comercios, pero que ahora no y después te llevaba hacia el Mustafa Centre, algo así como un Corte Inglés a lo bestia abierto 24h y para el que entrar había que dejar la mochila a unos tipos en la entrada para que la custodien, y no va a pasar nada, pero no me apetecía mucho entrar y menos dejar la mochila con los chismes de la cámara a nadie, así que he seguido el camino hasta llegar a otro templo hindú de nombre impronunciable y en el cual he entrado tras descalzarme. Entre turistas, gente orando y demás, había un poco de jaleo, pero estaba chulo, aunque tampoco he perdido mucho tiempo dentro.

La última parte del recorrido me ha llevado a pasar por una iglesia metodista... la cual no me presentaba interés alguno y es que lo de las guías es bastante relativo, por lo de siempre, a unos nos parecen unas cosas más interesantes que a otros, pero al fin y al cabo el autor debe abarcar lo máximo posible y bueno, ha debido considerar interesante el llevarte hasta allí. Una vez finalizada esa parte del recorrido el resto consiste en ir por calles con casas típicas de colores, aunque también he pasado por delante de una especie de mezquita de estilo victoriano y árabe, aunque no he hecho fotos, porque tenía que cambiar de objetivo y me apetecía más bien poco, porque empezaba a estar un poco cansado. Lo del calor no lo llevo mal del todo, a ver, no queda otra, por ahora es en el primer país en el que si bajo al metro paso menos calor que en superficie y es que el metro, aunque en los pasillos no todos están climatizados hace algo más de fresco que en superficie, de todos modos, cuando ando agobiado de calor me meto en un centro comercial o similar y listo, otra cosa parecida es el agua, por ahora de todas las botellas de agua fría que comprado, ninguna está tan fría como me gustaría, las mejores las que me dejan en el hotel y meto en la nevera, parece que no enfrían las cosas y eso puede ser también a que da igual que lo enfríes, porque con el calor que hace en nada está caliente de nuevo.



Así que en una de esas entradas a centros comerciales para evitar un rato el calor, me he plantado delante de una tienda de telefonía y he visto una tarjeta prepago y he pensado que por las llamadas me da igual, pero ayer si hubiera tenido datos podría haberme organizado mejor algunas cosas y hoy lo mismo, así que he pillado una, aunque en principio la iba a coger de Singtel, al final ha sido de otra, starhub, y es que en donde he entrado la de Singtel no era capaz de conectar con el sistema central y me ha llevado a la tienda de al lado. Así que ahora tengo un número de Singapur, pero que no conozco, porque no me he preocupado para nada en saberlo, mi interés eran los datos, y he cogido un 1Gb para una semana por 7$, ni de coña lo voy a gastar, más que nada, porque en dos días me voy, pero bueno, si finalmente voy a spottear y uso el flightradar, chupa bastante. El tener datos me ha servido para buscar la oficina donde tenía que comprar el HSRT Pass para Taiwán y tras finalizar el recorrido he ido hasta China Town, para buscar la oficina.

Ya tengo el cupón para el HSRT Pass, que tengo que canjear en Taiwán, me han pedido número de teléfono por si había algún problema, pero... no me lo se, bueno, como ya he puesto antes no le he puesto interés alguno, así que tras buscar a ver como poder saber mi número he desistido y le he dado el de movistar, que no sirve de nada porque ahora mismo el móvil lo tengo con la SIM de Singapur. Me ha recordado un par de veces que no pierda el cupón, que como lo pierda da igual que lo haya comprado, no puedo canjear el pase, así que lo he guardado bien en la mochila.

Como ya era la hora de comer, he buscado un sitio donde comer y he pasado de estar mirando en un sitio donde podría haber comido por apenas 10$ a comer por siete veces más... y tampoco lo he hecho tan bien como esperaba, el caso es que voy a pensar que hoy era el día que elijo normalmente en todos los viajes para comer de forma un poco más especial y listo, porque después de comer me he quedado un buen rato dándole vueltas al asunto. Así que después de esto, seguía sin saber muy bien que hacer, porque no veía el día para ir a spottear y tampoco sabía muy bien a donde ir, así que he preferido volver un rato al hotel y así coger el trípode para la noche.



Una vez en el hotel, aunque cuando he llegado parecía que iba a caer una buena tromba de agua, no ha sido así, es más ha habido momentos de sol y si estuviera más cerca del aeropuerto me hubiera acercado, pero estaba seguro que si iba, cuando llegase no iba hacer el sol y al final he pensado en ir al Marina Sands a ver el atardecer y hacer fotos desde la terraza. Una cosa buena del hotel, es que aunque el metro está a diez minutos, la línea me deja en Marina Bay, aunque para ir al hotel hay que hacer un trasbordo para una parada, pero no se tarda demasiado.

Cuando he entrado en el hotel, bueno, en la zona comercial y casino del hotel, lo primero que me ha venido a la mente es el Venetian de Macau, aunque salvando las distancias y es que este, al igual que el otro tiene un canal... las tiendas de la zona comercial, como si estuvieses en Serrano. Para llegar a la terraza o Sands Skypark, hay que ir a la torre tres y según llego, a la zona de subida leo algo de normas de etiqueta, pero ha sido una falsa alarma, era para uno de los restaurantes, es que es un hotel muy pijo, aunque dentro de lo caro no es de los más caros, unos 300€ la noche la habitación más barata, eso si, es uno de los mayores iconos de Singapur desde su construcción.



La zona pública de la terraza es la más al este, y tiene un garito de copas, el resto, de la terraza son restaurantes y una piscina, que ya me hubiera gustado probar cuando estaba ahí arriba, el caso es que cuando he llegado a comprar la entrada me han indicado la zona pública y que de usar el trípode, nada..., así que me han jodido, pero he subido igualmente. Una vez arriba las vistas son impresionantes, el perímetro de protección es una parte de baja de cristal, un reposabrazos y a partir de aquí unas líneas horizontales metálicas, para colocar la cámara con el trípode no hubiera sido cómodo, pero lo podría haber puesto en la parte del garito y si era por la gente que había, la verdad es que estábamos sin apreturas, y eso que se supone que era la mejor hora para subir, pero tenían de esas fotos que te hacen para que te lleves de recuerdo, que encima no las hacían arriba, si no antes de subir y con un chroma verde para poner el fondo al gusto... en fin, que apañando la cámara con la mochila y demás he apañado unas bonitas trepidadas en su mayor parte, de todos modos estaba tan espabilado cuando he salido, que se me han olvidado los disparadores... aunque bueno, siempre se puede hacer un apaño con el disparo retardado de la cámara.


Cuando he bajado, aunque era pronto he pasado por la zona de comida y es de esas en donde tienes un montón de cosas para elegir y te sientas donde quieres, total, que me he puesto hasta las narices, ramen, con dumplings, una bola rellena de carne y tres de sesamo, aunque dos me las he traído al hotel, porque eran demasiado. Todo muy rico y por bastante menos que al medio día. Cuando he salido no he pensado en hacer fotos, porque es un rollo sin el disparador, pero me he acercado al circuito y me han entrado ganas de hacer y al final he terminado llegando al hotel a las tantas, porque he estado líado con las fotos.


1 comentario:

LaPingu dijo...

woooooooooooooow Singapur es espectacular!!!!