martes, 15 de mayo de 2012

Japón Día 17 - Tokyo


La mala previsión metereologica se ha cumplido, daban lluvias y he tenido lluvia, pero me lo he tomado mejor que hace dos años. No se que tiene Tokyo, pero salvo los domingos, que las dos veces he tenido buen tiempo, el resto de los días que he pasado aquí no puedo decir lo mismo, es más, siempre he tenido lluvia, espero que el jueves se cumpla la previsión como hoy y tenga, al menos, nubes y claros pero sin lluvia y es que el cielo cubierto no mola para las fotos, es cierto, pero bueno, no supone mayor problema, pero la lluvia es más molesta para cambiar los objetivos, para llevar la cámara... hoy he vuelto a usar la funda que tengo desde Daigo. De todos modos, he hecho menos fotos que otros días.

Después de decidir, por la mañana que al final me quedaba en Tokyo, porque para ir a Matsumoto iba a ser un rollo, me he tomado la mañana con calma para salir del hotel, aunque tampoco es que haya dormido mucho, con lo cual esta mañana tenía unas ojeras bastante marcadas... hoy espero acostarme más pronto, porque además mañana, si que tengo que madrugar para ir a Matsumoto. El problema de quedarme en Tokyo era también el no saber muy bien a donde ir, y menos con lluvía, porque las fotos que tengo del otro viaje, pocas, las tengo en estas mismas condiciones, así que tampoco iba a variar mucho la cosa, el caso es que decidí ir a la zona del palacio imperial.


Para empezar he estado por el jardín este, en esta zona es donde se asentaba el castillo de Tokyo, hoy reducido a un parque, las murallas, las puertas y un par de torres, del resto tenemos constancia por las ruinas y es que estos japoneses durante el siglo XVII tuvieron sus más y sus menos entre ellos y estaban a la gresca un día sí y otro también. El caso es que por ejemplo, lo que más me ha impresionado son las ruinas de la Tenshudai, la torre principal, los muros que quedan tienen 20m de altura y apenas tiene diez filas de piedras, con lo cual os podéis hacer una idea del tamaño de las piedras. La torre en total medía 58m de altura, que no está nada mal, pero les duró sólo 19 años en pie, como ya he dicho, esta gente estaba todos los días dándose palos.

Después de estar paseando un buen rato por el jardin ha empezado a llover, lo bueno, o lo malo, según se mire es que ha sido a ratos. A la salida del jardin he ido redeando la muralla y el foso hasta que he llegado al puente Nujibashi a donde llegan autobuses de turistas para hacerse la foto y luego seguir a donde sea, así que me he hecho un hueco y he tirado algunas fotos. Como la parte esta estaba más o menos vista, me he planteado una ruta para ir al Hama-Rikyu, otro jardín que hay pegado a la bahía, de todos modos, para llegar hasta allí antes tenía que pasar por el edificio Sony y, por supuesto, por Sumiya, una tienda muy famosa entre los nikonistas. He mirado un encargo que tengo de Mario, pero no lo había, es complicado y yo no he mirado nada, porque no quiero que me entren tentaciones y la lie.

El edificio Sony ha cambiado un poco desde la otra vez, lo que son los showrooms, están casi igual, pero la tienda para gente de fuera está diferente, lo que no cambia es que no tienen nada que realmente me llamase la atención. La otra vez piqué y compré el walkman, pero esta vez no. He preguntado a ver si tenían un experia pero para extrangeros no venden teléfonos y si no estuviese tan encantado con mi reader, habría comprado uno en blanco la mar de chulo, que es superior al nuevo, aunque tampoco se que tiene de más, así que tampoco he comprado nada por esa parte. Hablando del reader, el otro día mientras esperábamos a que pasase el chdsk el portátil, como saqué el reader, le pregunté al de la tienda, que se interesó por ello, el porqué no había gente como cada vez se ve más en Madrid con uno y lo que me dijo es que no hay apenas de oferta de libros en japonés, así que poco negocio, porque tampoco es que hablen mucho inglés, por ejemplo.


Al salir de aquí he ido a la juguetería Hakuhinkan Toy Park, cuatro plantas llenas de juguetes y he estado trasteando un rato y comprando... he comprado un par de nanoblocks, el del Kinkaku-ji de Kyoto y otro nuevo del Tokyo Skytree, que aún no he ido a verlo, pero al que iré el viernes, aunque hasta dentro de una semana o dos no se inaugura y no podré subir, aunque bueno, realmente hasta dentro de dos meses, más o menos, no podrá subir nadie porque están todas las fechas cogidas, pero ya hablaré de ello, cuando llegue el momento, además he comprado una base para iluminarlos y una baraja de trenes. Quiero tener todos los nanoblocks de los sitios a los que he ido y tengan, claro, pero poco a poco.

Suguiendo el camino hasta el jardín me he parado a comer y después he encontrado un obstáculo, las vías del tren y es que hoy me ha pasado eso, de tan cerca... tan lejos, porque está ahí, al otro lado, pero para llegar allí... total, que me he desviado un poco y terminado en el puerto, en el puerto una cosa ha seguido a la otra y he pensado que pasaba del Hama-Rikyu y me pillaba un ferry a Odaiba.


Odaiba es una isla de la bahía que tiene centros comerciales, lugares de entretenimiento como museos, está el puerto y también la sede de la Fuji TV. Cuando iba en el ferry unos japoneses se han querido hacer una foto conmigo y hemos pasado por debajo del puente Rainbow, que es del estilo del de San Francisco, pero en blanco. Continuando con las réplicas de cosas yankees, en Odaiba también tienen su estatua de la libertad, así que entre unas cosas y otras al final he pasado la tarde y como ya estaba un poco cansado de lluevi y aún me paercia pronto para volver al hotel he entrado en un centro comercial y justo cuando me iba he encontrado una tienda frikisima de trenes, todo con cosas relacionadas con el shinkansen, así que he comprado una funda tipo calcetín para el móvil con el Hayabusa, que si antes casi no me enteraba cuando sonaba, ahora menos todavía, pero mola un rato, unos palillos del 500 series y un cascabel también con el 500 series.

La vuelta de Odaiba en tren hasta la estación de Tokyo, donde ya he aprovechado y reservado los asientos para mañana y para el viernes en el Narita Express, luego me he venido al hotel andando, a ver si era capaz de llegar sin perderme y prueba superada, he venido además muy directo. En el hotel he descansado un poco y he salido a cenar a un sitio que había visto que tenían pinchos a 100Y, así que he comido unos cuantos, no había carta en inglés, pero con el chaval del sitio me he entendido más o menos y he probado dos de cerdo y dos de pollo y luego uno que realmente no se que era, llevaba algo de carne enrollado en nigri y estaba bastante rico, así que he repetido.

Y ahora a descansar, que mañana toca madrugón.

No hay comentarios: