Esta mañana me lo he tomado con calma, al final no había reservado asiento en el shinkansen para ir a Hiroshima, porque teniendo en cuenta a las horas que me estaba levantando a lo mejor incluso podía coger alguno anterior, pero al final, entre unas cosas y otras he terminado cogiendo el Sakura 544, que será el mismo que coja para ir hasta Osaka el día que vaya a Tokyo. Así que al final he desayunado en el buffet del hotel, que hoy no había apenas gente y una vez todo arreglado, he ido a la estación con bastante tiempo, incluso pensando que podría coger algún shinkansen antes del previsto, pero lo único que salía en esa media hora, era un Kodama y le he preguntado a uno de los que controlan el tráfico en la estación si llegaría antes con el Kodama que con el Sakura, y me ha indicado que el Sakura, así que he estado haciendo fotos a los trenes hasta que ha llegado el mio. Menos mal que no cogí el Kodama, porque mientras estaba esperando al tren ha llegado el Dr. Yellow, que no es otra cosa que un 700 Series con equipos de control de vías que usan para eso, para ver el estado de las líneas, la verdad es que no lo he pillado nada bien, porque estaba dos andenes más alejado de por donde ha entrado y ya no me podía acercar porque si no perdía el mío... Al final pensaba que había salido de Hakata, pero no, el Dr. Yellow se había quedado allí, pero al principio del andén.
No me he fijado si hemos adelantado al Kodama, creo que no, porque he aprovechado el viaje para trastear en algunas fotos en el ordenador, pero da igual, la verdad, tampoco creo que hubiese llegado mucho antes. Nada más bajarme he visto los próximos trenes y había uno que ponía, no admite viajeros depot 984... así que tenía que ser el Dr. Yellow, casi seguro, y así ha sido, me he quedado un poco a esperar a ver que era y ha aparecido y ha sido la sensación, porque había gente haciéndole un montón de fotos, yo también, claro y algunos iban corriendo desde el otro andén para venir al que estaba y es que estos japoneses tienen verdadera pasión por los trenes y el Dr. Yellow al no tener un horario fijo es más complicado de ver, así que he tenido suerte.
Esa misma suerte que no he tenido en contra al llegar a Miyajima y es que me monto en el ferry para venir hasta la isla y con el tele empiezo a buscar la torii, y no la veo... creía recordar que sí se veía, pero bueno, a lo mejor no lo recordaba bien, el caso es que salimos de Miyajimaguchi y según nos acercamos sigo sin verla, pero en cambio hay una estructura cubierta que no estaba antes... pues resulta que en Abril hubo un problema con la torii, algo se desprendió creo y la han cubierto para repararla... así que mi gozo en un pozo, menos mal que tengo fotos de la otra vez, pero aún así... me ha fastidiado bastante, hasta finales de Junio no van a terminar, así que nada, esta vez me quedo sin fotos de la torii.
Nada más llegar al ryokan, la señora ya sabía que era yo, se ha disculpado por el problema con la habitación y que ya lo tenía arreglado con el otro ryokan y que por favor aceptase cenar en el ryokan, luego he subido a la habitación, a pesar de ser pronto ya me ha podido dejar entrar, en realidad me hubiese dado igual porque nada más dejar las cosas me he ido a comer un okonomiyake que es la especialidad de la zona y que la otra vez ya comí aquí y hoy he repetido el mismo, con zamburiñas y en el mismo sitio, riquisimo.
Con tantas prisas por salir no me había dado cuenta de dejar el portátil en la habitación, pero por no volver y molestar a la señora, para dejarlo he decidido ir cargado con él todo el día... menos mal que se lleva bien la mochila, lo que no se es como ha aparecido el reader, donde tengo el JR Pass en la mochila, pensaba que iba a tener que subir a la habitación a por él y es que sin JR Pass lo pasaría fatal, me ha entrado un poco de pánico cuando he ido a salir de la estación de Hiroshima y no lo llevaba... se me había caído al sacarlo del bolsillo... menos mal que un señor se ha dado cuenta y me ha avisado, así que con un alivio tremendo lo he recogido y puesto en su sitio.
He cogido el primer tren que iba en dirección Iwakuni, pero resulta que tres paradas después era su final de línea y había que esperar al siguiente, así que en medio de la nada he estado veínte minutos esperando, menos mal que han pasado un par de mercancias y los he retratado y es que la línea Sanyo tiene bastante tráfico de mercancias y pasajeros. Cuando ha llegado el tren, me he montado y, esta vez, sí, hasta Iwakuni.
En Iwakuni no tenía muy claro como había que llegar al Kintaikyo, un puente de madera de cinco arcos que cruza el río Nishiki, pero he visto que había que coger el autobús, así que eso he hecho coger el autobús y hasta la parada del puente. El kintaikyo me ha sorprendido, en las fotos parecia más pequeño, pero cada uno de los arcos centrales debe tener algo más de 40 m de luz, más luego los otros dos laterales, en total son algo más de 193m lo que mide. Para cruzarlo hay que pagar, pero he comprado un combinado puente, teleférico, entrada al castillo por 930Y y me he ahorrado algo, no mucho, pero algo...
El cruzar el puente no tiene mayor misterio, aunque mola la forma que tiene y la construcción, una vez al otro lado hay una zona con parques y algunas cosas interesantes de ver, aunque como iba un poco justo de tiempo para subir al castillo apenas he cotilleado lo justo para entrar en un sitio donde había serpientes albinas, que por lo que se ve son propias de la zona, un templo, en el que estaba todo cerrado y por eso no tengo sello de Iwakuni, porque luego al bajar he entrado en otro y resulta que no tenían sello... y el teleférco.
El teleférico me ha recordado al de Fuente De, porque no tiene soportes intermedios son los dos puntos y listo, tarda 3 minutos en salvar el desnivel. Una vez arriba a unos cinco minutos se encuentra el castillo, que, una vez más es una reproducción del original, pero en este caso es que el original terminado en 1608 sólo duró siete años en pie y es que en 1615 se aprobó una ley que decia que un único castillo por provincia y Hiroie Kikkawa decidió vivir y adeministrar su dominio desde Yokoyama. Así que en 1960 se reconstruyó el castillo, aunque en una ubicación algo diferente para que tuviera mejores vistas. En el interior del castillo hay una exposición.
Después de la visita la castillo, ya abajo he mirado un poco los alrededores, pero ya eran las cinco y estaba todo cerrado, o a punto, así que he decidido irme a la estación del shinkansen a ver si, con un poco de suerte, pillaba un 500 Series, ya que en Iwakuni sólo paran Kodamas. Cuando he llegado faltaban 40 minutos para el primer tren... pero ya que estaba allí no iba a volverme a la otra estación a coger el local, así que he aprovechado para reservar los asientos para dentro de tres días ir a Tokio en el Sakura 544 y el Hikari 468, una cosa menos de la que preocuparme, aunque tampoco he tenido problema hasta ahora para montarme sin reservar. Al final mi gozo en un pozo, cuando ha llegado el tren era un 700 Series RailStar, así que el S500 me vuelve a ser esquivo, mañana a ver si tengo más suerte.
Al final he llegado más tarde de lo que pensaba para cenar, casi a la hora que me hbía dicho la señora que terminaban de dar las cenas... soy lo peor... al final no sabía que pedir y le he dicho que me recomensase ella, me ha puesto una cena típica de la zona y ha sido espectácular... primero un poco de sashimi y dos ostras en algún tipo de salsa que no he sabidio determinar, pero que estaban muy ricas, primera vez que comía ostras y no me han disgustado, luego he seguido con un tazón con unos trozos de verdura, para continuar con tres ostras a la brasa y un cuenco con una crema de huevo, cuando ya pensaba que eso era todo, ha traido un plato de tempura, una sopa de miso, un cuenco con unos encurtidos típicos y un cuenco de arroz... luego de postre una gelatina de limón y té verde... ha sido espectácular, además estaba todo muy rico, me ha dado un poco de vergüenza, la verdad, porque no pensaba que fuese a ser tanto.
Luego ha salido a hacer algunas fotos, aunque con la torii cubierta no es lo mismo, eso sí, los barcos porculeros como la otra vez da igual si está cubierta o no, ellos siguen viniendo.
Mañana me cambian de ryokan, pero eso será por la tarde, porque por la mañana me voy a Tomonoura, un pueblo de pescadores, a ver que tal es y luego por la tarde no se, o me vengo pronto para acá a pillar el ocaso, aunque hoy daba lo mismo, porque ha habido una bruma todo el día o me quedo por Hiroshima.
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