martes, 23 de abril de 2013

Día 2 - Seúl


Aunque para hoy no daban lluvia, sólo cielos cubiertos, a media mañana las nubes han decidido que estaría bien mojar un poco el terreno, así que desde media mañana he disfrutado de una ligera lluvia que ha trastocado algo mis planes. El día empezaba con el desayuno del hotel, tipo buffet y lo típico en estos casos, dulce, salado, ensalada, cereales, tampoco una variedad excesiva, pero para mi suficiente, así que con zumos, plato con salchichas, tortilla y patatas más un par de cuencos de cereales he cogido fuerzas para patear un poco. La idea era acercarme a uno de los palacios que están cerquita del hotel y luego ir para otro lado. Así que primero me he acercado al santuario Jongmyo, pero ha resultado que los martes está cerrado, así que el siguiente paso ha sido ir al palacio Changgyeonggung, que es bastante grande y, además tiene un jardín.


Para ahorrar un poco he cogido una entrada combinada para los cinco palacios que además incluye, por ejemplo, el santuario Jongmyo, sólo la entrada al jardín secreto del Changgyeonggung ya vale 5000W, más otros 3000W de la entrada general y el pase cuesta 10000W así que merece la pena, porque además puedes usarlo durante un mes desde la fecha de compra. Cuando he llegado debía ser la hora de los colegios, porque había cientos de niños en grupos con sus profesores con micro y altavoz explicándoles las cosas y poniéndoles en orden, así que me he visto rodeado de niños por todas partes, algunos saludándome, ya que era uno de los pocos extranjeros que andaban por allí y somos algo extraño y en una de esas que estaba con mis fotos, ha llegado un grupito de enanos y uno de ellos se ha dirigido a mi y me ha preguntado de donde era, le he dicho que de España y me ha preguntado si había estado en la tomatina... me he quedado flipando, no se si se piensan que eso se hace en todas partes de España, pero ha sido de lo más curioso.


A las 11:30h me habían dicho que había un tour guíado por el jardín secreto, pero como estaba viendo que el día era una patata, sólo hay que ver las fotos, he pensado que tal vez no merecía la pena entrar hoy al jardín y dejarlo para otro día que hiciese sol, sólo tendría que comprar una entrada simple al palacio y luego pasar con la del ticket, así que he pensado que era una buena idea, todo sea que no tengo más sol en los seis días que voy a estar en Seúl, pero eso sería mucha mala suerte, aunque a saber, el caso es que me he ido hacia el palacio Changdeokung, que según la guía está un poco por detrás. Al final no he sido capaz de encontrarlo y he subido tanto que he llegado a la muralla, así que improvisación total y a patear por la muralla. Mientras estaba subiendo ha empezado a chispear, así que cuando he llegado al punto en donde te tienes que registrar para continuar la ruta por la muralla, porque es zona militar y he visto que se tardaba hora y media en hacer el recorrido me he rajado y he pensado que tal vez otro día, que en ese momento andaba chispeando, pero como se pusiese a llover lo llevaba claro, porque aún viendo el cielo, como no daban lluvia, he sido tan "listo" de no llevarme el chubasquero.


He bajado hasta una calle y he decidido que no estaría mal ir a por el chubasquero, por si acaso empeoraba la cosa, y me he vuelto al hotel, para ello he cogido mi primer autobús, que más que un autobús parecía una furgo, lo he hecho un poco a probar suerte, porque en las paradas que he visto, no hay indicaciones en inglés alguna y tampoco me he puesto a preguntar a donde iba, si no que lo he cogido porque iba en la dirección que quería ir y como ayer ya estuve pateando un poco, muchas vueltas raras tendría que dar si no pasaba cerca de algo que me sonase. El pago lo he hecho con la T-Money, 750W, se pasa al entrar y te lo descuentan, el conductor no se dirige en ningún momento a los pasajeros, hay una máquina para meter los importes, bastante más sencilla que las japonesas y que no dan cambio, así que hay que subir con el importe justo, a la salida vuelves a pasar la T-Money y listo, así que me he bajado en la plaza Gwanghwamun, en las fotos de la entrada anterior, donde los chorros de agua y la estatua. De ahí al hotel son quince minutos andando, así que he ido por la calle de los restaurantes, pero no me he decidido por ninguno, así que he llegado al hotel sin comer, tampoco tenía mucha hambre aún, ya que no eran ni las dos.

De vuelta a la calle, ahora con chubasquero, he ido hacia el ayuntamiento y luego callejeando un poco he terminado en Myeong-dong, que lo principal es que es una zona comercial y como tampoco estaba el tiempo para algo más interesante he recorrido sus calles, viendo los comercios, que en algunos de ellos, como en Japón hay chicas que anuncian a voz en grito algo, supongo que será que su tienda es la mejor, me han ofrecido entrar en un sitio de masajes, pero no era el momento, aunque uno de pies no me hubiese venido mal y como iba empezando a tener hambre me he metido en un sitio a comer un ramen con udon y un trozo filete de cerdo con ensalada. He aprovechado el momento para estudiar un poco que hacer a partir de ahí y como la puerta Namdaemun estaba al lado al terminar he ido para allá.


De camino a la puerta he visto varias tiendas de fotografía, ya sabéis, si hay una tienda de algo, las siguientes serán de la misma temática, esta mañana pasé por una zona de joyerías y ahora tocaba de fotografía. No he querido mirar mucho, porque, en principio, no tengo intención de comprar nada, así que mejor dejar las tentaciones aparte. Namdaemun es la puerta sur de la muralla, la muralla rodeaba la ciudad de Seúl, pero actualmente quedan restos desperdigados y alguna de las puertas. En el caso de la Namdaemun es el tesoro nacional número 1, pero en 2008 hubo incendio y actualmente están terminando de reconstruirla, así que me ha tocado hacerla fotos de mala manera.


Frente a la puerta y detrás de las tiendas de fotografía está el mercado de Namdaemun, que no es otra cosa que un montón de calles con tiendas y puestos por el centro de algunas. He estado paseando por allí y en una de los sitios he visto como cortaban los fideos de udon a mano. Siguiendo el callejeo he llegado a unos grandes almacenes, los Shinsegae, y me he metido a descansar de lluvia. Son bastante parecidos a cualquier otro gran almacén por departamentos, excepción de Harrod's, así que tampoco había mucho que ver, la zona de fotografía era un tanto decepcionante, ya que apenas era un mostrador, con lo cual tampoco ha habido tentación alguna de mirar nada.


Lo de Starbucks es una plaga, bueno, lo de esta cadena y cualquier otra similar, hay una cada pocos metros y todas con gente y en el caso de Starbucks, igual de caro que en Madrid. He pedido un te con leche y al final ha sido un te sólo... el descanso lo he aprovechado para volver a consultar donde poder seguir viendo alguna cosa interesante y he visto que no andaba muy lejos del Namsangol Hanok, un pueblo de casas tradicionales, de hecho esta mañana ya había pasado por una zona donde había varios Hanoks, al norte de Insa-dong, el caso es que como el santuario al que fui a primera hora, los martes está cerrado... aún así se puede visitar los jardines de alrededor y me he encontrado con una especie de cráter. He bajado y en el centro hay una circunferencia, que está dividida, en cada una de las divisiones hay un mensaje de una ciudad diferente, Sydney, San Francisco, Bogotá, México, Sao Paulo... no he contado cuantas eran, pero española no había ninguna, cada mensaje está escrito en el idioma del país donde se encuentra la ciudad, y luego en el centro de esa circunferencia hay una placa, que no es otra cosa que una tapa. Bajo la tapa hay una capsula que se metió el 29 de Noviembre de 1994 con 600 objetos actuales de esa época, ropa, comida, etc el caso es que en el año 2394 se abrirá de nuevo esa tapa y se sacarán todos los objetos para que la gente que lo haga en ese momento vea cosas de nuestra época actual. Un tanto curiosa la historia, aunque a saber si el genero humano llega tan lejos.


Cuando he terminado de ver eso, me he cansado de patear bajo el chirimiri y me he vuelto al hotel hasta la hora de la cena, como ayer. Lo he hecho en Metro, que la verdad, no es nada complicado de usar y de moverte en él. Lo que me gusta es la cantidad de salidas que tienen todas las estaciones, en la que está al lado del hotel hay quince, así que en un plano de la zona, te marcan lo que es cada línea de metro y lo que sería el andén y luego a donde dan cada una de las salidas y es que bajo tierra, como en muchas ciudades hay otra ciudad subterránea y te encuentras cantidad de tiendas, cuando no, centros comerciales. En los carteles las salidas están indicadas de color amarillo y el número correspondiente, así que es muy fácil salir por donde tienes que hacerlo.

He vuelto a cenar en la zona de restaurantes, como ya he dicho hay un montón, así que hoy ha tocado uno de esos que tienen el hornillo en el centro para hacerte la carne, aunque en vez de a gas, te traen un cazo con  brasas y las ponen en el hueco, mejor, porque la carne a la brasa sabe mejor. Al final con la falta de práctica se me han churruscado un poco los trozos de carne, así que después he pedido otra ración, tampoco he cenado a lo bestia que cada ración son cuatro trozos. Después, de vuelta al hotel, he ido a por los peces, pero esta vez la señora ya había cerrado el chiringuito, así que he ido a buscarlos a otra calle y es que hay un montón de puestos callejeros por todas partes y con un montón de cosas, buscando los peces he visto, por primera vez los de las bolitas de pulpo :), además hay de pinchos de carne, de makis, una especie de perritos calientes enrrollados en algún tipo de masa, una especie de tostada con huevo y queso por encima, pinchos de una masa de huevo... cantidad de cosas, unas con mejor pinta que otra, pero que en un momento de hambre te pueden matar el gusanillo por apenas un euro y poco.

Por si alguno anda preocupado por la situación por aquí y sus vecinos del norte, tranquilos, aquí la gente hace su vida normal y yo creo que ni se enteran de las tonterias del vecino, al menos esa impresión tengo, ayer mientras comía pusieron las noticias y no hubo nada sobre el tema, sin embargo si que pusieron algo sobre el atentado de Boston.

A ver mañana como nos levantamos, si hace sol intentaré ir a alguno de los palacios y si no, pues es probable que me acerque a Gangman, y hablando de Gangman, la verdad es que la cancioncita de Psy, aunque no la he escuchado por aquí aún, ha dejado huella, hay camisetas con dibujos de Psy con las manos en la forma del baile, muñecajos... lo típico del merchandising.

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