domingo, 5 de mayo de 2013

Día 14 - Busán


Hoy casi podría considerarlo como el último día de viaje, porque mañana la intención es después de llegar al hotel, que está cerca del aeropuerto ir un rato a spottear y luego ya veremos, pero bueno, hoy es lo primero y para ser el último día me he levantado un poco más tarde después del madrugón del día anterior y las dos últimas palizas que me había metido, sobre todo la del primer día en Busán necesitaba recargar un poco las fuerzas, aunque al final termino despertando bastante pronto, pero bueno al menos hoy me lo he tomado todo con más calma y no he terminado reventado, de todos modos hay cosas que al final me voy a quedar con ganas de ver o hacer, pero eso es lo normal, esperemos que haya una segunda oportunidad.

Me he acercado a la zona centro, si es que Busán podemos decir que tiene algo así, que yo creo que no, porque está todo tan desperdigado que para ir a cualquier sitio es, mínimo, una media hora. Como de camino, dos paradas antes, estaba la estación de tren he aprovechado para comprar el billete para el KTX de mañana. Después de comprarlo me he arrepentido un poco, porque me voy a pegar un pequeño madrugón innecesario, pero bueno, una vez hecho pasaba de cambiarlo. Con el billete comprado pues en vez de volver a coger el metro me ha dado por ir andando y me he metido un poco por el puerto.

Busán es el quinto puerto del mundo por movimiento de contenedores, es el primer puerto de Corea y la puerta a Japón, ya que hay enlaces diarios entre diversas ciudades de Japón y Busán, de hecho estuve pensando en ir de nuevo a Fukuoka desde aquí, pero lo descarté por que no merecía la pena con los días que venía. Así que el puerto es inmenso y ocupa bastantes zonas de la costa, además de que se está ampliando una de las zonas de movimientos de contenedores, por si esto no fuese suficiente además se está construyendo un nuevo puente por encima de la bocana del puerto, y la verdad es que es impresionante, ya casi están unidos los dos extremos, pero tiene una altura bastante considerable, miraré a ver que características tiene, se va a llamar Bukhang.


Cuando he terminado de hacer fotos he ido, finalmente a donde pensaba ir en principio, a Yongdusan, que con el paseo ya lo tenía al lado. En la guía y el plano pensaba que la torre estaba en medio del parque a nivel de suelo, pero para llegar hay que subir unas escaleras mecánicas, unos cuatro tramos y te dejan a pie de la torre prácticamente  Hoy en Corea además de ser domingo era festivo, el día de los niños, así que en el parque había muchas actividades para ellos y aunque era festivo y domingo, la mayoría de las calles comerciales estaban con todos los comercios abiertos y montones de gente.


La torre no es muy alta, pero al estar en alto, pues se domina bastante lo que hay alrededor, además hoy hemos tenido una mañana bastante clara, sin la típica neblina y se podía ver bien bastantes metros a la redonda, aunque los edificios de la marina de entrada a Haeundae, donde tengo el hotel ni se veian casi. El caso es que he hecho unas cuantas fotos desde arriba y he pensado en volver por la noche, pero como tiene los cristales inclinados tal vez iba a tener reflejos y además quería volver al APEC. Al bajar he entrado en un museo de maquetas navales, unas ochenta más o menos, entre ellas nuestro Juan Sebastían Elcano.


Iba siendo la hora de comer, así que me he metido por el mercado de Gukje y mientras miraba donde meterme a comer he visto una tienda de esas para turistas y he comprado algunas cosillas, sobre todo los imanes, que todavía no había comprado ninguno de Corea y ya con esto también hecho, pues al final me he metido en uno de esos sitios que te preparan el arroz en la mesa, Galbi, creo que se llaman y he pedido pollo con queso, pero no llevaba arroz pero estaba rico igualmente, aunque picaba de narices.


Otra cosa que me quedaba por ver de la zona, más por curiosidad que por otra cosa era el mercado de pescado de Jagalchi, además del edificio que tiene, a sus pies hay una calle a reventar de puestos de pescado, en muchos casos tienen el pescado vivo, así que puede pasar como cuando he pasado, que ha saltado un bicho de la pecera fuera, es bastante auténtico, aunque el olor de algunos salazones es repugnante, pero bueno, es curioso y había que verlo. Es una de las cosas que te sorprenden de ciertos países, ya me pasó en Brasil por primera vez, en Tailandia... la venta del pescado en la calle como si nada, sin hielo... y siempre nos decían que era donde se compraba el pescado más fresco, aunque creo que este tipo de puestos no pasaría los controles de sanidad de unos cuantos países europeos.

Era hora de plantearse la tarde y como he visto una oficina de turismo he preguntado como llegar en bus hasta Taejongdae, una isla frente a donde estaba y que está conectada por dos puentes paralelos y actualmente un tercero que sale por el sur, cuando esté terminado el Bukhang, será su cuarta conexión con el resto de la ciudad. En la parte baja de la isla está todo cogido por los puertos y astilleros, está una de las terminales de carga, una zona de pesqueros y la terminal de cruceros internacionales, pero en el extremo posterior hay un parque y es allí donde he ido... cuarenta minutos de autobús más tarde estaba a las puertas del parque y aquí en vez de hacer lo que he hecho que ha sido ir a patita para ver el faro y el observatorio debería haber cogido alguno de los barcos que hacen el recorrido por la costa y te puedes bajar y subir en diferentes puntos, hubiese ganado algo más en las fotos, porque el paseo entre árboles tampoco decía demasiado, y ahora a posteriori pues eso, que debería haberlo hecho.

Para la vuelta a Haeundae la chica de turismo me había dado tres números que salían del mismo sitio donde me había dejado el que me había llevado y que no era el que tenía que coger de vuelta, pues no se como lo he hecho, pero lo he cogido... me he dado cuenta casi cuando estábamos llegando de nuevo a Gwangbok, así que me he bajado y pensado en principio coger el metro, pero es que es tan pesado que al final he esperado al autobús que debería haber cogido desde el principio, el 88, como además los trasbordos son gratis, pues sin problemas. Como Taejongdae está a tomar viento de Haeundae, pues había que coger otro autobús, el 3003, que he tenido suerte, porque en el que iba lo ha pasado antes de llegar a la estación de tren que es donde tenía que pillarlo, así que he bajado de uno y he montado en otro, en este he pagado medio euro, porque es un express y tiene menos paradas, pero tarda un huevo, otros cuarenta minutos hasta el APEC.


Aquí he llegado demasiado pronto y luego no he tenido el valor de saltarme una valla y meterme en las rocas como estaba uno haciendo las fotos, pero bueno, he estado un ratito leyendo y cuando ha llegado el momento me he puesto a las fotos. A ver si entre las del otro día y las de hoy saco algunas decentes, aunque creo que eran mejores las del primer día, porque había nubes y ganaba el cielo. Cuando me he cansado, vuelta al hotel, pero antes había que cenar y me he metido en uno de esos de barbacoa coreana. Todo muy rico, lo mismo que  el pan de Gyeongju, tienen una masa de judia dentro y está muy rico, aunque dudo que lleguen a Madrid :P


En fin mi último día en Busán y ha sido bastante provechoso, creo, aunque lo del barco hubiese estada bien, la verdad. Mañana me toca traslado a Incheon, última parada del viaje antes del martes coger los bartulos y volver a casa.... No quiero :(

No hay comentarios: